En una casita así no puede faltar nada, por eso en su interior hay unas estanterías para colocar sus libros o juguetes preferidos, colgadores para dejar la chaqueta o la mochila y un módulo con ruedas para jugar tranquilamente.
Jugar a las casitas siempre ha sido el pasatiempo preferido de l@s niñ@s. La casita les arropa, les protege y la pueden construir de mil maneras distintas; coquetas casas de muñecas, cabañas en el bosque para exploradores intrépidos, originales tipis ¡ o montañas de mantas y cojines! Cada niñ@ construye la casita a su medida y marca las reglas del juego. La casita se convierte entonces en un lugar secreto y mágico donde dibujar, esconderse, pintar, merendar, soñar… estas son algunas de las muchísimas cosas que l@s niñ@s podrán hacer en la casita del PROGRAMA NIDO de ROS.
Una casita versátil que ofrece infinitas posibilidades, funciones prácticas para desarrollar el juego, la lectura, la autonomía y la imaginación.
¿Jugamos?
